lunes, 19 de abril de 2010

TU PRESENCIA

La tormenta se hace brisa
mi vacío se llena de aire
el camino se despeja
y el dolor en sonrisa.

La ansiedad se calma
mis pies son como plumas
la ropa es piel
y toda la forma alma.

Hoy te he soñado
qué inmensa alegría
por un gran momento
la noche me hizo alado.

¡Oh no!, de nuevo te vas mi deidad
ya vuelve otra vez la tempestad.
Y con mi cuerpo de ti manchado
siempre te desearé, en honor a la verdad.

1 comentario:

MANUELO dijo...

Es fácil de entender, pero por si acaso: refleja uno de los estados del enamoramiento con masturbación incluida.