jueves, 2 de octubre de 2014

TU BELLEZA FEMENINA


Aquella tarde maravillosa. Como tú. Más de cinco horas haciendo el amor sin parar. Me dijiste: “Eres una máquina de hacer semen”. “Es el amor que te tengo, vida, que no cabe en mi cuerpo” Me convertiste en un animal sexual. Tu tacto, tus besos, tus olores. Tu belleza femenina. Todos aquellos celos por no tenerte aprisionada todo el día, toda la noche, toda la vida… Fóllame otra vez, amor mío… Escuché de nuevo, cuando mis fuerzas comenzaban a odiarme. ¿Cómo no? 
Podría morir vaciado.
Viajar al otro mundo bien lleno de ti.
Después te marchaste, como siempre. 
Con él.
Y supe que perpetuaría aquel momento. A lo largo de toda mi existencia.